Historias anteriores

22 de diciembre de 2007

Frágil




- Fue hace tanto…
Siendo sólo un muchacho te conocí. Nos quisimos tanto cariño.

Puso las flores sobre la tumba en el que ella se encontraba hace ya 4 años, y se sentó limpiando las lágrimas que caían de sus ojos claros.

- No sabes la falta que me haces, no sabes lo difícil que se me hace vivir cada día, sin ti…
Hay algo que me mantiene vivo, ¿sabes? Es tu recuerdo y es por eso que…un sollozo lo hizo detener, no pudo evitar llorar un momento, en silencio y solo, sentado bajo un gran árbol que le daba sombra al ángel que yacía junto a él.
- Estoy enfermo, dijo al fin. Pero no sé que fue lo que le hice a la vida, no sé por que me trata así, amor…te extraño tanto…
Mi enfermedad. Si fuera solo eso, me alegraría ya que podría estar pronto contigo, y podría abrazarte otra vez…como hace tanto tiempo ya, como cuando jóvenes, ¿te acuerdas?

- Cariño, la vida se empeña en que te olvide, y no me da la oportunidad de irme contigo…
Se empeña en quitarme lo que mas quiero…te llevó de mi lado, y…- apretando sus manos dejo que el llanto bañara sus ojos…
Ahora la vida quiere llevarse tu recuerdo amor…y eso no, no lo podré soportar…sin ti…

- Mi amor, tengo alzaimer…y cada día, de un momento a otro, se me olvida algo de ti…y eso me esta matando en vida…
Si aun sigo aquí, es por que tu recuerdo me ha acompañado, y ¿que haré si no puedo recordarte?…dime que hacer, Dios…
Lo que intento decirte hoy… es que aunque la vida me arranque tu recuerdo, yo te seguiré amando…tanto como el primer día, cuando te lo dije en aquella esquina en santiago, esa noche cuando nevó ¿Te acuerdas?
Ni siquiera el olvido, me hará dejar de amarte…

Dejo el ramo de lilas, y la rosa color calipso junto a la fotografía de hace 40 años, donde siendo unos veinteñeros se reían de la vida…siempre te gusto el calipso…eso aun no lo olvido, dijo sonriendo…
- Amor, ya no podré seguir viniendo a verte, se me esta olvidando el camino…- no pudo evitar un suspiro que dejo caer una ultima lagrima…
Sus ojos se perdieron en la memoria, mirando fijamente un punto en el horizonte…

-¿Papá? Ya es hora de irnos.
-Irnos, si acabamos de llegar y aun no encuentro a tu madre.
Papá, es hora de irnos, has estado ahí por mas de una hora.
Y quien eres tú muchacho, ¿donde esta mi esposa?

Y un viento se llevo su último recuerdo…

No hay comentarios.: