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13 de enero de 2008

Mar y amar


Navegando una noche, vió que una tormenta se acercaba. Tomo sus precauciones, tomando la cuerda y asegurando lo mas fuerte posible lo indispensable.

No debí adentrarme tanto- pensó.

La radio nunca funciono ese día, y el buscó en el mapa el camino mas seguro y con menos roqueríos para cuando llegara la tormenta, no tuviera problema y se hundiera.

Estando encerrado en el camarote, solo como siempre, sintió la soledad como nunca.
En una esquina se encontraba la fotografía de Sofía, su pequeña de 5 años.

No puedo dejarla sola - pensó para sí. Cuando vuelva buscare un trabajo que no me exponga de esta manera.

Los recuerdos lo abarcaban en ese momento; estando frente al juez, su mano entrelazada a la mujer a la que por tanto tiempo amó, recordó los buenos y malos momentos, las risas y los llantos.
Cuando Sofía apareció en el mundo, cuando todo lo que pensaba de sí, se perdió en esa pequeña personita, en sus cabellos rojos y ojos obscuros que con cariño sonreía.
Los momentos tristes cuando Leonor su mujer enfermó. Cuando no hubo nada mas que vestidos negros en el armario.

La tormenta llego, y la pequeña barcaza se movía de manera brusca al tiempo que grandes olas la bañaban.

No pudo dejar de pensar en Sofía, hasta hace poco entro al colegio. Y casi no la veía a causa de la falta de dinero en casa, que lo hacia trabajar mas horas en la mar que de lo regular.

Sofía, esa noche miraba a través de la ventana como la lluvia lo bañaba todo. Sus ojos se perdían en la lejanía pensando en su padre, a pesar de sus cortos años, ella entendía la vida que le había tocado vivir, y apesar de todo, era feliz. Pero un susto se apodero de ella en esa noche…

El viento soplo en el mar como nunca lo había hecho antes, y una voz le susurro, que de ésta no saldría…
Sofía sintió un punzón en el pecho y puso sus manos en su corazón, algo no estaba bien…papá.

Una gran ola se levanto en el mar oscuro de la noche sin luna, cubriendo el barco y despedazándolo todo…

Sofía cayó desplomada al piso.
Su padre trataba de hallar el camino a la superficie en la oscuridad de un mar revuelto, donde no veía nada y donde al parecer su suerte ya estaba echada…

En el hospital dijeron que fue un ataque fulminante que destruyo su corazón.
En el hospital de la armada, un agónico pescador aun luchaba por su vida…
cuando una pequeña se acercó y lo tomo de la mano, él a pesar de todo sintió la tibieza de su pequeña mano, dejando caer una lágrima…Sofía, dijo al fin…dejando que un sonido agudo de una maquina, silenciara una despedida…



En un túnel oscuro caminaban, tomados de la mano.

- Bueno por lo menos vamos juntos ¿no?
- Sí, dijo con su voz risueña y abrazando la pierna de su padre…

- ¿Sofía? – dijo una mujer que se encontraba sentada en una blanca banca frente a un gran árbol.

- Mamá!!! Gritó, hechándose a correr como nunca…

Y un abrazo hizo olvidar todo lo vivido, y un beso de él a Leonor hizo que todo volviera como al principio cuando todo era perfecto…

Algunas veces cuando pierdes…ganas.

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