De ida y Vuelta

¿Me extrañaras?- me dijo con su voz dulce la ultima vez.
¿Todo el tiempo, amor?- le dije mirando sus profundos ojos claros.

Eran las vacaciones del colegio y nos despedíamos como si se fuera a otro continente, pero el amor de adolescentes es así de intenso algunas veces o quizás simplemente fue que nos adelantamos en conocernos, no tuvimos a nadie más y así nos encontramos, el uno para el otro…el amor de mi vida.

Te llevo conmigo donde vaya, por que hasta cuando cierro los ojos estas ahí…conmigo.

Así paso el tiempo, y al volver nos dimos cuenta que la distancia nos hizo querernos mas, si eso es posible, no sé fue como un relámpago, simplemente estaba en la estación…
Vi como caminaba a través de la gente, con su maleta pesada y con ruedas, ella no me vio sino hasta mas tarde y esa sensación esas mariposas en el estomago, hicieron que me sintiera tan raro, tan no sé, enamorado…

Hola cariño – dije frente a ella, y ella se colgó de mi cuello diciéndome todas esas frases que ella soñaba las noches lejos de mi…y yo sin ella.